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El peor alumno de la clase

No se si el peor, pero quien más o quien menos, hemos ido a clase con chicos o chicas que no eran para nada estudiosos o nosotros mismos hemos sido esos alumnos. Aquellos a los que a veces de verdad parecía que los profesores les tenían manía porque daban la lata, no eran "correctos", discutían, ponían en entredicho sus explicaciones o simplemente pasaban de todo. No eran los peores pero eran malos estudiantes. Durante los años de colegio e instituto había muchos profesores o maestros que se pasaban el tiempo recordándoles los inútiles que eran y que nunca llegarían a nada en la vida. 
Y todos sabemos que eso ES MENTIRA. 

No conozco a uno, ni dos, ni tres de esos malos estudiantes que hoy tienen carreras profesionales brillantes. Y no sólo viven bien económicamente, sino que se permiten el lujo de hacer lo que realmente les gusta. Conozco a uno que es jefe técnico de una televisión autonómica, el jefe de todo. Incluso está dando clase en una universidad privada. Estudió lo mismo que yo pero por FP, porque él era mal estudiante y yo buena. Jejeje, yo me fui por la universidad y mirad dónde estoy. Me parto la caja. Y sí, le costo mucho aprobar BUP y COU, le costó horrores. Pero una vez salió de ahí, todo fue ascender. 

Conozco otro que en 2º de BUP no sabía ni por dónde le daba el aire, si del norte, el sur, el este o el oeste o todo a la vez. Era tal el lío mental que llevaba que decidió dejar de estudiar, hizo hasta 3º BUP pero no sé si lo aprobó, creo que no, y se metió de voluntario en el ejército, en la marina. Pero su pasión era la ópera. Y poco a poco, él solito, empezó a saber de ópera, mucho, empezó no sólo a saber, conocer, aprender sino que a solas cantaba, ensayaba intentaba averiguar cómo llegar a esas voces. Cuando dejó el ejército aún seguía un poco despistado, pero tenía claro que lo primero era la ópera, el canto. Y empezó a recibir clases y terminó haciendo el examen de ingreso en la Escuela Superior de Canto de Madrid. Ya no recuerdo si lo aprobó a la primera, pero el caso es que al final pasó por la escuela. Y hoy, vive de la ópera. Es tenor, canta en el coro nacional, ha cantado en el coro del ¡Teatro Real! y estoy segura de que será muy feliz. 

Y conozco al que no llegó a BUP, el que era el tonto de la clase en EGB, el que no era ni digno de preguntarle nada porque nunca sabía nada. El que llegó a acabar la EGB porque eso al final se acababa. Y se montó una empresa, de construcción, sí y ¿qué? se forró. Así. Sin más: de tonto a emprendedor. Cada vez tengo más claro que el emprendimiento está muy relacionado con los malos estudiantes. 

Y conozco a los que pasaban de estudiar, a los que no les gustaba ni un pelo y tenían claro que aquello no era lo suyo. Que sufrían en clase, que nunca disfrutaron de ninguna asignatura porque no tenían esa inquietud y decidieron meterse a trabajar en la fábrica del pueblo. Y allí siguen, con un trabajo sencillo pero que le es gratificante y les permite llevar una vida cómoda, hacer sus viajes, no privarse de casi nada. Ser muy felices. Aunque a veces fastidia madrugar. ¿Pero creéis que no le cuesta madrugar a cualquiera? Otros simplemente han ido pasando de oficio en oficio, algunos han logrado cosas que yo jamás he tenido a mi alcance: conserjes del colegio, de la biblioteca, auxiliares en el Ayuntamiento, técnicos de deportes...Y otros se fueron a la capi, buscaron trabajo en fábricas más grandes, ahorraron mucho, viven de maravilla, han formado su familia, tienen negocios propios (tiendas, casas rurales...) participan activamente de las cosas culturales o no del pueblo, en definitiva han sabido salir adelante más que dignamente. 

Y aquella pareja que se metió de cabeza en la hostelería de batalla, la de campaña, la del bar de carretera, de camionero, de menú y fue haciendo dinero de manera que cuando la que estaba en la universidad, yo, no tenía un duro, ellos vivían más que holgadamente. Y tuvieron hijos, porque ese era por encima de todo su deseo y su idea de felicidad. Y yo, no los he tenido, primero porque no he podido, después ya...pues igual no he querido. No he podido planteármelo.

Mi hermano, no fue un gran alumno en la ESO. Le costó horrores acabar, suspendió algún curso. Clases particulares todos los veranos. Pero al acabar se hizo un grado superior y tiene su trabajo, en Perripueblo, en la única empresa que se ha instalado en el polígono, una empresa potente, con unas condiciones bastante buenas. En su segundo año de trabajo ya ganaba lo mismo que su hermana mayor, o sea yo, en diez años. Tiene su piso, su coche, sus pertenencias, sus ahorros, sus caprichos. Nunca conocí a sus profesores, pero creo que a mi madre no le hablaban muy bien de él. Poco menos que era tonto....¡Ains! 


Hay una chica de Perripueblo que hace unas fotos de morirte. Es una fotógrafa excepcional. Aficionada, artista. Porque no vive de ello. Es su pasión personal. el otro día publicaba esto: 
                                         

Y yo estoy muy de acuerdo. Porque ella tampoco estaba bien considerada en el instituto. Era de las molestas, las tontas, las no estudiosas. Le tocó un curso con mucha competencia en cuanto a inteligentes se trataba y eso nubla al resto. 

Y ahora no sé muy bien qué conclusión sacar de todo esto, tal vez que la educación, aprender, el colegio, el instituto es importantísimo. Es incluso lo que hace que todos podamos tener las mismas oportunidades, pero hay que relativizar y saber que ni te eleva ni te hunde ser mejor o peor estudiante. 
O quizá, que como decía mi profesora de la academia, cuando tienes la duda entre aprobar o suspender a un alumno: apruébale. 
O tal vez que ni los tontos son tan tontos, ni los listos tan listos. 
Yo era tan buena estudiante que sólo he sabido ser eso, buena estudiante. 
A mí me hubiese gustado ser un poco peor. La verdad. 
¿Qué opináis? 




Conversaciones sobre profesores con una madre

Este verano en las piscinas de perripueblo charlé con una madre que me contaba que su hija, 14 años, había suspendido música, matemáticas y francés. La madre parecía muy coherente en el planteamiento que tras los suspensos le hizo a su hija; pese a que ella, la hija, se quejaba de que los profesores habían sido muy injustos con ella  la madre le dejó claro que la culpa era suya, que no había hecho nada durante el curso y que de esos barros estos lodos. Me dijo que no la había castigado; con muy buen criterio la madre no ha prohibido a su hija que deje de hacer cosas, o salir de casa, pero claro, el verano de la chica,si quiere aprobar en septiembre, no va a tener nada que ver con el verano de alguien que haya aprobado todo. No es que no puedas salir, le dice a su hija, pero tú mañana a las 9 tienes que levantarte y estudiar y rendir y no puedes estar cansada. 
Me parecía muy coherente y razonable todo lo que me decía. Por eso, cuando me habló de la profesora de música y de que ella pensaba que realmente esta profesora se había pasado con la chica no pude por menos que ponerme de lado de la madre, aunque siempre lo hago con mis dudas al no conocer la otra versión. 
La cuestión es que música la suspendió con un 4,80 y la razón que dio la profesora a la alumna para no concederle esas 0,20 puntos es que no había hecho nada durante el curso. La alumna le negó a la profesora que eso fuera cierto y la madre me confirmaba que así era, que su hija otra cosa igual no, pero los deberes los llevaba hechos todos los días. La profesora ante la insistencia de la joven (un día de clase al que por "acuerdo tácito interalumnos" sólo acudieron otra alumna y ella a clase) le dijo que le llevara el cuaderno para ver las tareas hechas y quedaron al día siguiente, a la hora del recreo, en la sala de profesores . Cita a la que la profesora no fue y la alumna, enfadada, se fue en su busca a una cafetería cercana en la que sabía que la profesora tomaba su café. Allí le dio el cuaderno, desafiante, diciéndole que allí tenía las tareas y que desde luego, como podría comprender, no se había pasado la noche haciendo la tarea del todo el curso para presentárselo. El caso es que finalmente la profesora no le aprobó y le dijo, según la madre me contó, que en septiembre le iba a poner un examen tan difícil que le iba a dar igual estudiar todo el verano porque no iba a aprobarlo.

La madre ponía cara de alucine según me lo contaba y yo entre alucine, incredulidad, no sé si creerlo y que profesora más majadera. 
La madre me contó que su hija  había pensado coger música también en 4º de la ESO porque le gustan las artes, pero que tras este lío con su profesora no pensaba estudiar música el curso próximo. Lógico, yo tampoco querría meterme en clase con una majadera así. 

La madre, creo que como es lógico, terminó haciendo su reflexión personal acerca del profesorado en general de su hija y la verdad es que bajo su evaluación personal muy pocos profesores salían bien parados. Es normal que al final una manzana podrida haga ver igual de podridas al resto. Para ella la mayor parte de los profesores del instituto pasan mucho de todo. 

En estos casos suele ponerme un poco a la defensiva y tiendo a defender a los docentes, aunque sólo sea por llevar la contraria (porque la pura realidad es que yo no tengo ni la más remota idea de qué es lo que se cuece en un instituto a día de hoy). Y le dije que es más complicado de lo que parece, que quizá mucho trabajo bien hecho no se aprecie y que por culpa de uno malo todos acaban juzgados por el mismo rasero. Que los hijos mienten mucho o disfrazan la realidad y que hay muchos padres que pasan mogollón, cosa que ella me reconoció porque por lo visto en perripueblo es normal no ir a clase cuando los alumnos se ponen de acuerdo, por ejemplo dos días antes de las vacaciones ya no van, dicen en casa que no va a ir nadie y los padres tan pichis. ALUCINO. Ella me dijo que a la clase de 4º ESO fueron únicamente 2 alumnas los dos últimos días: su hija y otra chica. 

El caso es que luego reflexioné sobre la mala fama que en general suelen tener los profesores. No sé, es difícil que se reconozca su trabajo, lo malo suele resaltar mucho más que lo bueno. Actitudes, si son ciertas, como las de esta profesora de música no ayudan y a mí desde luego me sobran. Me indigna que un alumno dejé de estudiar una asignatura por un docente estúpido. Supongo que también dejará mucho que desear como compañera de trabajo. Y no sé si esto a nivel de claustro se ve y se mira hacia otro lado o si habrá profesores kamikazes que alguna vez le digan a esta gentuza que mejor que se hubieran dedicado a la cría del pepino salvaje.

La cuestión es que todos hemos sufrido algún o algunos malos profesores. Malos de verdad. Pienso que ser profesor no es nada fácil. Ser un buen profesor depende tanto de los ojos que te miran...  Pero y ser padre, ¿se han planteado los padres lo que los profesores piensan de ellos? Seguro que también hay muchos que piensen que dejan mucho que desear.

No sé si me explico.





Pd: La chica ha aprobado mates y francés. No música, que no la ha aprobado nadie porque efectivamente puso un examen para no aprobar. ¿Se estará asegurando la mujer(zuela) tener trabajo este curso?
  Con un "par", la chica, este curso, ha vuelto a coger música porque a pesar de todo le gusta esa asignatura. Yo, seguro, que no lo habría hecho.