Yo asumo, tú asumes, él asume las responsabilidades de los hijos.

Últimamente he leído sobre los deberes de los alumnos. Que si son innecesarios o si son muchos, o ambas cosas. También llegó a mis manos un "polémico" post de una madre que al parecer ha saltado a la fama por haberse negado, desde su blog, a hacer de agenda de las tareas de su hija. 
En cuanto al primer tema, no lo tengo claro pero me fio mucho de opinones de personas que trabajando en la educación y siendo como creo que son profesores o maestros implicados en la enseñanza no terminan de verle la gracia. 

Me voy a quedar en el segundo tema. 
Cuando leí el artículo en cuestión, de inmediato estuve de acuerdo con la escritora. Y lo sigo estando: Los padres no deben responsabilizarse de los deberes de los hijos. En realidad, lo que me llamó la atención fue que algo tan obvio, tan claro, tan lógico (para mí lo es) haya terminado creando tanto revuelo alrededor, tanto como para que la escritora del artículo haya sido entrevista en medios de comunicación, nacionales e internacionales. Eso significa que a alguien, mucha gente, demasiada le ha llamado la atención el tema. Bien porque igual que ella están hartos de ser los "responsables de las responsabilidades de los hijos" o bien porque "haya gente escandalizada de que una madre no  quiera acarrear con esa tarea". 

No entiendo lo que pasa con el tema deberes y responsabilidades. Lo digo muy en serio. A ver, esta madre no habla de cantidad de deberes, no habla de que su hija tenga poco tiempo libre al llegar a casa, no habla de que hacer los deberes les impida hacer otras actividades infantiles o familiares. Habla de que las madres de los compañeros de su hija, y ella misma durante un tiempo, a través de un grupo de guasap se dedican a preguntarse entre ellas, madres, las tareas que por ejemplo se le han olvidado a alguno de sus hijos, las fechas de exámenes de las que alguno de los hijos no se acuerda, etc, o sea que se dedican a hacer el papel de sus hijos: a masticarles la comida antes de metérsela en la boca. 
No entiendo que se arme revuelo porque una madre diga que ya no lo hace más. El revuelo significa que esto es lo normal y que lo raro es: que una madre se niegue a enseñar a su hija a ser una completa inútil, que se niegue a hacer de esclava, de criada de su hija.

En relación con los deberes mi mente tampoco da para más con otro tema: padres que hacen las tareas de sus hijos. ¡Ojo! no hablo de ayudar, ni de repasar o de complementar. La diferencia es sutil, es verdad, pero yo hablo de: hacer las tareas DE, no: hacer las tareas CON. Por ejemplo, hacer las tareas CON es darles una ayuda, una guía, si no saben algo indicarles un poco en qué parte del libro puede estar, qué pueden repasar, plantearles la pregunta de otro modo o simplemente estar atentos a que tus hijos hagan los deberes, vamos qué sepas de qué va su vida académica. 
Hacer las tareas DE es buscar en internet el nombre de....Preguntar a tus amigas del guasap cómo creen ellas que se soluciona tal cosa, quién era tal persona, hacer las manualidades tú (que tienen que flipar algunas maestras con la destreza que tienen algunos niños), en definitiva sacarles las castañas del fuego. Tampoco entiendo cómo corrigen luego algunos maestros, porque se tiene que notar a la legua qué niño ha hecho las tareas con algo más que ayuda a qué niño no. Por no decir que las dudas se han terminado, porque qué dudas van a tener...Y ¡ay de los que las tengan! Esto es ¿normal? (Dejando de lado otra discusión: la de que no todos los padres tienen la "suerte" de poder conciliar trabajo, casa, deberes...)
Me pregunto cuántos padres están haciendo primaria ahora mismo...

Volviendo al tema del "polémico post" insisto en el hecho de que los niños sean responsables de sus deberes, ¿es que acaso no forma parte de su educación ir adquiriendo responsabilidades? Que haya padres que tengan que reivindicar algo tan obvio y que otros pongan el grito  en el cielo me resulta esperpéntico. 



9 comentarios:

  1. Yo cuando lo leí también me quedé un poco como: "¿Y qué?". Es que, no sé, para mí es lo lógico. Cuando las madres no tenían whatsapp cada uno miraba sus deberes. Ahora parece ser que se está extendiendo la moda de las agendas, que muchos maestros las piden ya obligatoriamente, para que los chavales se acostumbren a apuntar en un sitio sus tareas y sepan dónde acudir. Me parece buena idea. Desarrolla, desde pequeñajos, la capacidad de autogestión de los aprendizajes y demás.

    La cuestión está en que, para aprender, tenemos que "padecer" consecuencias. Si la niña en cuestión -creo que era una niña- se olvida de apuntar los deberes, pero no pasa nada, porque al día siguiente los llevará hechos. ¿Va a poner más cuidado la próxima vez? Pues probablemente no, porque sabe que tiene Plan B.

    No hablo como madre, claro, pero yo creo que algo fundamental en la educación de los niños -hijos nuestros, alumnos, loquesea- es enseñarles que cada uno asume las responsabilidades de sus acciones. Porque si no, luego queremos que las asuman todas de golpe, y va a ser complicado.

    Vaya tocho xD ¡Mua!

    ResponderEliminar
  2. Buuufff!! Mira si yo tengo la cabeza que tengo es debido a que ya no uso la memoria, y me siento tranquila porque con el móvil a mano todo funciona, pero como pierda el móvil... Leñe que no me quedo ni con los pisos de mis amigas! Que cada vez que voy tengo que preguntar piso y letra por wassap. Y queremos agilipollar de esa manera a los niños? con tan tierna edad? Pues no. Esa madre hizo bien, seguro que la niña no se volvió a olvidar de nada.
    Una cosa que he visto también es el tema de los horarios semanales...he visto a padres hacerles la mochila a sus hijos, metiéndoles los libros que les toca al día siguiente. Yo me llevé algún negativo por equivocarme de libros pero bueno así aprendí.
    Está claro que no se les puede dejar a su bola, hay que preguntarles al menos si han hecho todos los deberes y si han tenido dudas.
    Yo no me rompo la cabeza, no tengo hijos y listo!

    ResponderEliminar
  3. En relación a esto hace poco ví también en un telediario como padres estaban en desacuerdo con la cantidad de deberes que tenían sus hijos y, para remediar el tema y que el niño no se sintiese mal LOS ACABABAN HACIENDO LOS PADRES.
    Hola?? Cómo?? Pues me parece fatal, mucho más las excusas "es que los niños se llevan 10 horas en el colegio y luego tienen que hacer deberes", "es que no disfruto de mis hijos"... Vamos a ver, si tú como adulto trabajas mil horas al día no es culpa de tu hijo que no tengas tiempo para él, pero el chaval no tiene porqué dejar de lados sus obligaciones por estar contigo. Para mí es más importante la calidad que la cantidad del tiempo, en este caso. Pero la obligación del chaval es hacer los deberes, muchos o pocos esto es otro tema, pero si como padres queremos que nuestros hijos sean independientes, maduren, se autocontrolen... entonces tenemos que fomentar que ellos solitos se vayan gestionado el tiempo. Y lo de las mil horas en el colegio... por experiencia sé que muchas veces se pasan allí tanto tiempo por comodidad para los padres, y eso me parece muy feo.
    Lo del whatsapp lo veo lógico, yo me salgo hasta del grupo de mis amigos dee la infancia, como para aguantar un whatsapp de padres de compañeros o maestros.

    ResponderEliminar
  4. Tema escabroso.
    Yo también aluciné porque la gente alucinara con ese post. También lo di por hecho.
    De pequeña no recuerdo llevar "agenda", me apuntaba las tareas en el cuaderno, el libro, un papel suelto... y, por supuesto, se me olvidaban a veces... aún tengo grabado un martes de invierno por la noche (igual eran las ocho... pero era de noche) haciendo hooojas y hoooojas de caligrafía en nuestros "adorados" cuadernillos Rubio... porque se me había olvidado hacerlo antes. Los repasos a última hora por... ¡ahí va! ¡Mañana tenía un control!

    Pues así aprendí.

    Mis padres estaban pendientes de que hiciera mis tareas, me explicaban dudas (es curioso, porque mi madre era maestra antes de hacer su segunda carrera pero al que más recuerdo ayudándome con las tareas es a mi padre), me tomaban la lección... me ayudaban. Pero nunca me han hecho un trabajo, dibujo, redacción, cuenta... Y si no la llevaba a tiempo, pues no la llevaba.

    Como dice Coccinellidae ¿queremos agilipollar a los niños?

    ResponderEliminar
  5. Mira, es un tema difícil. Y te lo digo porque lo vivo desde los dos lados. Por una parte, como profe, se nota un montón que hay chavales que tienen ayuda en casa, a veces de la buena, de la de estar pendientes de ellos, y otras veces de la de mandarles a un profe para que les haga los deberes, que vienen con ello hecho pero no han entendido nada. El otro día, les mandé, por ejemplo, que describieran un lugar imaginario, estilo Narnia, o Howarths, o lo que fuera, y uno me trajo la descripción de Macondo, a la perfección, hecha por su profe, me reconoció, porque él no sabía qué era eso de Macondo.

    Peeero, por otra parte, participo en un grupo de wasap de madres. De mi hijo pequeño. Allí cada día se preguntan por deberes, exámenes, cosas que hay que llevar o hacer... Y sé que no debería, porque los niños cuando no se han enterado o no han copiado todos los deberes nos dicen: pregúntaselo a alguna madre, y saben que así será.

    No es bueno para ellos, y lo estoy dejando, esa es la verdad, intento, y ya lo he hecho en varias ocasiones, que mi hijo vaya con los deberes sin hacer si no los ha apuntado, pero las notas de la profesora son broncas a los padres. El sistema está mal montado, porque los deberes tenemos que vigilárselos, corregirlos, mirarles cada día la agenda. Si un día me retraso en firmar una nota de la agenda, la nota de la profe es: deberíais molestaros en mirar la agenda de vuestro hijo y cosas por el estilo.

    No digo que las madres lo estemos haciendo bien, pero todo es con la mejor intención. A mí me ha costado horrores dejar que mi hijo esté solo haciendo los deberes, que se vaya haciendo independiente, no porque no quiera, sino porque traía anotaciones de lo que no hace día sí y día también, y creo que los profes también tenemos que pensar que son niños y darles un margen para que se vayan haciendo mayores.

    Bueno, un rollo te he soltado. Y total, para no decir nada.

    Besos.

    ResponderEliminar
  6. Lei el famoso texto y alucine. Todavía no tengo hijos, pero en mi circulo cercano son varias las "madres esclavas" y alucino. Luego nos echamos las manos a la cabeza porque los niños con 15 años son vagos, dejan de estudiar, no hacen ni la cama o levantan la mano a sus padres

    ResponderEliminar
  7. Anda que has dicho...has dicho mucho Ro.
    Primero: me quedo alucinada con la "notita" (leasé con todo el rintitín del mundo) de la maestra de tu hijo. Me parece una pasada de frenada muy grande, creo que esa nota tiene una respuesta que quizá alguien tan "flower power" debería empezar a saber...

    Casualmente con este tema del post mantuve una agria discusión con una íntima amiga que dijo barbaridades del estilo a:

    la mujer que escribe este post esta sacando sus insatisfacciones por no poder dedicar tiempo a su hija y debería dedicarse más a su hija y dejarse del blog

    (Me salí del grupo de guasap de mis amigas !!íntimas!!, con eso lo digo todo) Bueno pues mi amiga contó como la maestra de su hijo le pone "notitas" del tipo:

    Manolito, tienes que estar muy contento de tener unos papis que se preocupen tanto por tu educación.
    [Yo creo que quiere hacer un trío con ellos o algo...;-) (Sí, yo suelo ser terriblemente sarcástica con todo este tipo de cosas)].

    Tanto tu notita como la de mi amiga me parece que están más allá de lo normal, lógico y no se si decir profesional. Hay muchos, no, muchísmos padres que ¡¡¡qué más quisieran señora!!! que estar atentos a sus hijos y hacer manualidades y llevarlos a recoger hojas todos los domingos de otoño y hacer trabajos que no les mandan y mil cosas, pero la conciliación laboral en este país no existe...(4 privilegiados como mi amiga tienen esa suerte) Y/o hay padres maravillosos que también quieren tener algo de vida propia y adulta. Tampoco pasa nada por no querer entrar en el reino de Peppa Pig y demás.

    Aún así, aunque puedas y tengas todo el tiempo del mundo, mi percepción y creo que es la de todas las que habéis escrito es que acarrear con las pequeñas responsabilidades de los hijos no es ayudar, sino maleducar.

    Gracias a todas por vuestros largos comentarios.

    ResponderEliminar
  8. Jajaja, en el armario de mi aula tengo una caja (de esas de los paquetes de folios), repleta de agendas olvidadas por los alumnos, además de cuadernos, libros de texto, libros de lectura, todo tipo de lápices y bolis, guantes...
    Antes eran los alumnos los que me preguntaban si había visto su agenda/libro/guantes olvidados. Después dejaron de preocuparse y era yo quien buscaba al dueño del material olvidado. Últimamente, ya paso un poco: si en dos semanas no pregunta nadie, me llevo el libro para el donarlo al curso siguiente. Es que ni se preocupan...

    Con una alumna he tenido dos veces movida: maestro, es que no lo apunté en la agenda y por eso no he hecho los deberes... Pues nena, haz como se ha hecho toda la vida, pon una x en las actividades del propio libro de castellano...

    Sobre algunas madres: le enseño a una tres exámenes de su hijo, a cuál peor que el anterior, de solo un tema cada uno, el último de ellos ya con todas las preguntas del propio libro, y me suelta "y harás recuperación?" Estábamos a una semana de cerrar la 1a. Eval...

    En fin, felicidades por el blog y por los comentarios. Seguiré viniendo a leeros, porque lo de escribir con el móvil y a casi la 1 de la noche...

    ResponderEliminar
  9. En la vida me han hecho a mí los deberes, ayudarme SÍ y lo digo orgullosa pero hacérmelos jamás. Con las manualidades no es lo mismo porque siempre fui un zote pero si mi hermano o mi madre me hacían algo yo tenía que hacer al menos dos más en mi casa.

    Recuerdo un profesor de dibujo en el instituto que les dije a mis padres que me tenía manía pero como siempre he dibujado fatal me dijeron que eso no podía ser verdad (les faltó decir que dibujaba como una kk).

    Más tiempo pasaba, más insistía yo y un día les dio por creerme y mi hermano me hizo las láminas de dibujo técnico y yo en casa también estuve haciendo esos mismos dibujos. Presenté los de mi hermano (aparejador y un fiera del dibujo técnico) y claro, el profesor no podía suspender aquello porque se le hubiera visto mucho el plumero. ¿Qué hizo? Pues con su dedo me emborronó el lápiz del dibujo y dijo que no podía ponerme buena nota ¬¬

    Que me desvío del tema, yo no creo que los padres debamos ser agendas, yo de hecho me niego desde ya a ser la de mi niña

    ResponderEliminar

Ahora me encantaría saber qué piensas tú