Tengo unos amigos a los que les encanta eso de socializar. Yo huyo.
Mis amigos, en su luna de miel, se hicieron amigos de otra pareja. ¡¡qué horror!!, pienso. Porque no es que conocieran a otra pareja y hablasen y comentasen y se tomaran una copita (que para mi ya sería demasiado), sino que se hicieron amigos de hacer todo juntos. Y por supuesto hubo visitas mutuas tras sendos viajes de novios. No puedo con ello. Me parece un coñazo absoluto irte de viaje con tu pareja y tener que "hacerte amigos". Me supera y me aburre y me agobia y además me jode.
Estos mismos amigos viven en una de esas nuevas urbanizaciones de barrio, que consiste en varios chalets adosados de manera que entre todos formen una especie de plaza central, espacio común de todos los vecinos, a la que sólo los propietarios de dichos chalets tienen acceso. Este tipo de construcción hace que QUIERAS A NO ¡¡¡TENGAS QUE CONOCER A TUS VECINOS!!. Yo no querría!!!! pero ni de coña!!! ufffffff!!! me dan sudores solo de pensarlo. Pues bien, mis amigos y sus vecinos se conocen. Viven allí como en una especie de Melrose place, pero con niños. Los niños se cuelan en la casa de otros y de repente tú te estás pintando las uñas de los pies y te aparece un niño que no es tuyo y te pide la merienda, o te cuenta que sus padres le han mandado a buscar a Pepito (licencia de la bloguera, porque desde luego en este tipo de urbanizaciones sociales ningún niño se llama Pepito, a lo mejor se llama Adrián. Sí Adrián seguro que hay alguno), o te pregunta si le dejas los juguetes de Pepito, o donde está Pepito, o si puede salir Pepito a jugar. Y lo curioso es que Pepito está dandole el coñazo a los padres de Susanita que en ese momento iban a montar la cómoda Birkeland aprovechando que Susanita se ha ido a jugar a casa de Paquita y Manolín.
Cuando llega el cumpleaños de alguno de los niños, se celebra en común. ¡¡Venga vecinos vamos a emborracharnos como buenos veciamigos aprovechando que mi churumbel (se lo copio a pseudosocióloga, espero que no me pida derechos de autor que estoy muy malamente...;-)) cumple añitos!!. Hacen una chupifiesta en el patio, o en el jardín y mientras todos los niños juegan o ven al mago Pumuki los papis-amigos y vecinos y residentes en una urbasocial se toman unas cervezas y son muy amigos. Y charlan de sus hijos, de sus birkeland, de sus amantes, de sus trabajos, de qué día pondrán en marcha la piscina de verano, de cuando celebrar la próxima fiesta, del vecino del 20 que nunca sale al patio.
Es curiosísimo el caso de esta urbanización de mi amiga. Bueno lo llamo así pero no es una urbanización, son varios adosados, en total quizá sean unos 20, si llegan. Lo curioso es que en la zona del jardín todos tienen colocadas las hamacas EN EL MISMO SITIO y todas orientadas EN LA MISMA DIRECCIÓN. Me pregunto si eso lo habrán decidido en junta de veciamigoschachi. O si simplemente uno de ellos, el primero que puso las hamacas, fue el que marcó tendencia y ya todos le siguieron el rollo. Es muy fuerte porque todos los jardines son casi iguales. Siguen una estética perfecta. Me temo que cuando les vendieron la casa, les pusieron la condición de ser personas megasociables. Porque que se hayan juntado tantas personas del mismo "palo" me parece muy raro. ¿O seré yo la rara?
Yo no vivo en comunidad, y ME ALEGRO. No me gusta ser sociable, me gusta ir a mi rollo. No me gusta que me inviten a muchos eventos, porque es muy posible que el día que sea el evento a mi me apetezca mucho mas quedarme en casa o hacer algo por mi cuenta. No me gusta tener que contar mi vida ni mucho menos escuchar otras vidas. Me da igual esa parte del ser humano. Me gusta estar sola, disfruto enormemente de mi soledad o de estar solo con mi pareja. Y no tengo hijos y si los tuviera serían raros porque JAMÁS IRÍAMOS AL PARQUE Y YO JAMÁS ME TOMARÍA UN CAFÉ CON LAS MAMÁS DEL PARQUE. No lo hago ahora con las del gimnasio... Y no es porque me caigan mal, no tiene nada que ver son eso. Es simplemente que no me gusta interactuar de esa forma. Que quiero mi libertad a toda costa. Así de simple y así de complejo.
PD. Mis amigos son excelentes personas y siempre hablan fenomenal de sus vecinos, no son de ese otro tipo de gente que invita a todo kiski a su casa y luego les ponen a parir. Simplemente son felices en ese rollo. Y yo me alegro por ellos.
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